En la era post-pandémica, el fenómeno económico clave del nearshoring se consolida como un impulsor fundamental para agilizar las cadenas de suministro y mejorar la eficiencia productiva de lugares como Nuevo León. México, gracias a su ubicación estratégica en relación con Estados Unidos y al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), emerge como un actor clave en la capitalización de este modelo de producción. Sin embargo, es crucial examinar detenidamente los desafíos pendientes y los requisitos para una implementación sostenible a nivel nacional, en medio de la creciente preocupación por la competitividad que países como Vietnam podrían representar para México.
Nuevo León: líder en atracción de inversión extranjera
El norte de México se erige como líder en la atracción de Inversión Extranjera Directa (IED), proyectando una captación que superará los 100 mil millones de dólares en los próximos tres años. Este éxito no se limita únicamente a la seguridad y a los costos operativos competitivos. Según un informe de la organización Caminos de la Libertad, Emprender México, Nuevo León, Sonora y Coahuila destacan por su seguridad energética, una burocracia más eficiente, una mayor facilidad para iniciar negocios y una sólida seguridad jurídica.
Estados del sur de México enfrentan desafíos
Contrastando con este panorama, estados como Oaxaca y Chiapas enfrentan retos significativos, desde altos niveles de informalidad hasta problemas en servicios básicos como la electricidad.
Surge entonces la cuestión crucial: ¿cómo propulsar al resto del país hacia un desarrollo económico equitativo y competitivo? Las regulaciones excesivas, las prácticas proteccionistas y los privilegios industriales a menudo limitan la construcción de un ecosistema propicio para la competencia. Aunque los incentivos fiscales pueden brindar mejoras temporales en la viabilidad de los corredores industriales, se requiere una visión a largo plazo que aborde la reforma del marco regulatorio y la simplificación de procesos burocráticos.
Durante el Nearshoring Talks CDMX 2023, el embajador de Corea en México, Huh Tae-wan, compartió una perspectiva valiosa al afirmar: “México debe aprovechar esta condición económica no solo para beneficiarse, sino también para contrarrestar las desventajas inherentes a su estructura económica”. Resalta la necesidad de reformas estructurales que no solo atraigan más IED, sino que también permitan una mayor libertad económica para impulsar la competitividad de las empresas locales, permitiéndoles integrarse y crecer junto a los titanes industriales y tecnológicos.
Nuevo León: ejemplo a seguir para el resto del país
Mientras Nuevo León, Sonora y Coahuila se erigen como ejemplos a seguir, es imperativo que México desarrolle y fortalezca las condiciones que han llevado al éxito a estas regiones: certidumbre jurídica, un sólido estado de derecho, un ecosistema amigable con la competencia y la generación activa de empresas. Se presenta una oportunidad no solo para competir, sino también para establecer un modelo sustentable de desarrollo económico en la era del nearshoring.
